El tango y el cine siempre han tenido un vínculo especial. En “Tuve el corazón”, la historia recrea casi una lírica tanguera, donde el esfuerzo, la decepción y la fortuna se enlazan alrededor del personaje de un promotor musical, encarnado en Oliver Kolker, que descubre en un mecánico, interpretado por Walter Chino Laborde, a un genuino cantor de tangos.